sábado, 19 de octubre de 2013

En Egipto ... ¿fraude piramidal?

pirámide.
(Del lat. pyrămis, -ĭdis, y este del gr. πυραμίς, -ίδος, originariamente, pastel de harina de trigo de forma piramidalder. deπυρός, harina de trigo).
1. f. Geom. Sólido que tiene por base un polígono cualquiera y cuyas caras, tantas en número como los lados de aquel, son triángulos que se juntan en un solo punto, llamado vértice.
2. f. Arq. Monumento, por lo común de piedra o ladrillo, con forma de pirámide. Las pirámides egipcias. Las pirámides aztecas.

    Según la RAE, la definición de pirámide no admite mucha duda. Es o bien un objeto geométrico de ciertas características o algo que tiene esa forma. Curiosamente, en el mundo empresarial se suele hablar de pirámide para referirse a triángulos convenientemente diseccionados a los que se les han añadido las instrucciones pertinentes para dar a entender que hay pocos con mucha responsabilidad y muchos con poca. Generalmente, esas instrucciones también suelen dar a entender que hay una remuneración proporcional, con proporcionalidad entre directamente proporcional y exponencialmente proporcional. 

    No es el ámbito empresarial el único que suele confundir triángulos con pirámides. Basta con buscar "pirámide" en Google Imágenes. Veremos muchas fotografías de las egipcias y, entre ellas, algún que otro triángulo travestido de pirámide. Por ejemplo, la ya famosa pirámide de Maxlow. Entre las primeras de la búsqueda, aparece por ejemplo esta de www.mujeryempresa.es.  

    Las pirámides tienen muy buena prensa en unos casos y muy malos en otros. En términos pseudocientíficos, las pirámides tienen un atractivo indiscutible. Y de forma independiente aunque incluyendo a veces a personas del grupo anterior, en términos económicos las pirámides no salen precisamente bien paradas. Las pirámides empresariales son casi una broma ante los llamados "fraudes piramidales" con la posible excepción de las pensiones, fraude tan piramidal como el de los sellos de Fórum Filatélico pues se basa en que las aportaciones de los nuevos miembros del club son las que se utilizan para pagar los "intereses" a los antiguos. No voy a decir que sea lo mismo pues las diferencias son evidentes pero las diferencias no deberían distraernos de las similitudes que también comparten.

    Sin embargo, hoy quisiera centrarme solo en la "broma", las pirámides empresariales y no tan empresariales. Ayer iba en el coche escuchando la radio cuando una famosa escritora musa de lo que comúnmente llamamos "izquierda" comentaba a grandes rasgos que el sistema capitalista y sus grandes empresas no puede sino ser injusto pues se basan en la competencia mal entendida donde el trepa pisa a quien tenga que pisar con tal de escalar puestos en la pirámide. Así pues, algo basado en esa estructura piramidal no puede sino ser como ella creía que era. 

    El ejemplo que ponía era el siguiente (creo que sacado de un libro que había leído y con el que ella estaba bastante de acuerdo): Un joven licenciado que entra en una corporación y al que le encargan la misión de hacer un ERE, pierde la capacidad de empatía al minuto siguiente pues piensa que si no lo hace él, lo echarán y lo hará otro. 

    Vaya por delante que esta mujer habla solo de la empresa privada, salvando no sé si de forma consciente o inconsciente a la pública. Siga que un joven licenciado raramente entrará en tal posición a no ser que sea un enchufado lo cual tampoco es en absoluto descartable pues mi experiencia directa en la empresa privada e indirecta en la empresa pública es que el nepotismo no es exclusivo de ninguno de ellas. Continuemos hablando de pirámides, por ejemplo en los partidos políticos o los sindicatos y de cómo en ellos se imponen (llegan a ministro o a presidentes de comunidad) personas que solo hicieron BUP o que tardaron 10 años en acabar una carrera. Sazónese con ese regusto que deja el no haberse dedicado nunca a algo que no fuera la política  o con el orgullo que da no poder disentir del pensamiento único por eso que se llama "la disciplina de partido".

    ¿Tanto se diferencia una pirámide de otra?. Quizás no se diferencian tanto porque ambas son reflejos de una sociedad. En una sociedad en la que prime la cultura del esfuerzo y la decencia es seguro que la gran mayoría de las "capas altas" de la política tendría que irse por acción u omisión y probable que sus homólogos en la empresa privada tuvieran que hacer lo mismo. En cambio, en el paraíso de la picaresca olímpica (como la recientemente descubierta) luchando a brazo partido con italianos y griegos por los puestos del podio, no podemos sino tener los empresarios y los políticos que nos merecemos.

    Así pues y ya para terminar, el argumento de esta tertuliana me parece bastante miope, partidista y parcial. Ve lo que quiere ver e ignora aquello que no le conviene. Generaliza y piensa que en todos los sitios cuecen habas sin pararse a pensar si es así o no es así. Estoy convencido de que pensará que en EEUU la cosa es peor y puede que hasta así sea (aunque también tienen cosas mejores que nosotros en otros ámbitos). A veces quizás sí que se habla de Europa y que tal o cual político, alcalde o fontanero ha dimitido por algo que aquí consideraríamos un pecado venial. No quiero ni imaginar lo que ocurriría en Inglaterra, Alemania o Japón ante escándalos como los de Bárcenas y los ERE. En nuestro caso, según nuestra preferencia bucanera o lo vago que sea el ojo, elegimos un parche que se acomode bien al derecho o al izquierdo y echamos mano del "Y tú más".

    No sé cómo será la cosa con el ejército en Egipto (desde luego sus matanzas no pintan bien) pero en España la clase política sí que me parece un fraude piramidal alentado y consentido por los que, y me incluyo, hemos votado a PP o PSOE en los últimos, digamos, 10-15 años. Hará ya unos 5 años que no los voto y como estén contando con mi voto para perpetuarse/alternarse, la llevan clara.

Un saludo, Domingo.

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